Outdoor training, aprender disfrutando

Outdoor training, aprender disfrutando

En el Post anterior hablábamos de cosas que no se ven pero que influyen. Esto, es realmente importante en todos los órdenes de la vida, pero especialmente en los grupos y equipos de trabajo. En mi caso lo veo de continuo, especialmente en los procesos de coaching ejecutivo en los que intervengo, en donde aprecio que la diferencia entre éxito y fracaso, la diferencia entre un equipo cohesionado y productivo y otro desmotivado, plagado de infelicidad y falsamente unido por la estrategia del palo y la zanahoria, es simplemente cuestión de una pléyade de sutilezas.

Sin duda, todas ellas pueden ser tratadas con sesiones ad hoc de coaching ejecutivo. No obstante, para que un proceso de coaching tenga efecto, la persona que lo recibe tiene que estar dispuesta a analizar qué está ocurriendo, mirar hacia dentro y hacia fuera, reflexionar y estar dispuesta a trabajar en el cambio; pero esto no siempre ocurre, primero hay que creer y segundo convencerse de que, quizás, algo no estamos haciendo bien. Admitir que podemos estar equivocados puede no ser plato de buen gusto. Un camino demasiado costoso que a lo mejor consideramos no compensa.

Por eso, en mi caso soy un ferviente seguidor de las sesiones de outdoor training: una formación basada en una experiencia creada a medida en un aprendizaje vivencial orientado a reproducir de forma lúdica, situaciones de la vida a la que de forma real se enfrente ese equipo. Así, de forma divertida ese equipo estará, sin darse cuenta, reproduciendo, mientras juega, su día a día para obtener unos resultados que, al final de la jornada, serán analizados en conjunto.

Con ese ejemplo real, el equipo podrá ver de forma clara sus dinámicas; analizar por qué no han conseguido su objetivo o, de haberlo hecho, estudiar qué se habría podido hacer mejor. También en qué se ha fallado, y sobre todo, cómo se han sentido sus miembros, cuándo ha cambiado su emoción, etc. Un responsable de equipo puede, por dos horas, ponerse en la piel de un empleado, y el empleado en la del jefe, para así analizar sus patrones mentales y sentir cómo afectan al otro; sus elementos comunicacionales; sus dinámicas de trabajo, etc. Una oportunidad única para aprender disfrutando con la seguridad de que no habrá sido sólo la teoría dada por un experto sobre un estrado, sino que lo habremos vivido en primera persona. Y como todo aquello que no es contado sino experimentado, entrará en cada persona de ese equipo para que nunca vuelva a ser el mismo.

Eso es el outdoor training y sobre eso, y muchas cosas más hablaremos en el I Foro de la Empresa Ciudad de Narón, a dónde estás invitado el día 11 de abril en el Pazo de A Cultura. ¡Sé parte del cambio!: participa en el mayor evento empresarial de Narón y Ferrolterra. Te estamos esperando.

Rodrigo G. Dopico. Organizador del Evento. Interim Manager especializado en Ventas y Director de Logos Vendere.